«…cuando la misa concluye el trono se va acercando al dintel de la Puerta, como esa Puerta de la Misericordia abierta en toda la Iglesia, proclamada por el Papa Francisco.
“Los nervios de los chiquillos, el revuelo de los ramos, la sencillez de un pollino hace que lo quieran tanto. Jesús bendice con ternura su Mano se dirige al Cielo y te sirve de consuelo se avecina su amargura. El dintel queda pequeño, la palmera roza encima pero los niños lo aclaman Triunfante en su Salida.
Las palmas están batiendo, los olivos se levantan y en el celeste del Cielo comienza Semana Santa
Va subiendo armonioso el Rey de reyes sereno entre la gente va hermoso con su ropita de estreno
Sube el trono a lo más alto, Lo miras..te llega la Paz y en volanda sin mecerlo sube la calle de Atrás
Y llega hasta lo más alto, por fin llegó a la deriva suena Pescador de hombres bendice la Fuente Arriba
Misericordia Jesús, Misericordia cuando pases por mi puerta, no dejes de bendecir mi casa, tu casa abierta, mírala, que tu campana vibre con tono de queda, que sepa acoger en Betania a mis amigos, que sepa ser instrumento de Paz como la santa palmera que roza el Sol de mi pueblo y de pronto es la escalera para subir a ese Cielo y significa la espera
La gente sigue aplaudiendo, el Callejón bote en bote y vienes majestuoso feliz entre los perotes.
Y los vivas, los aplausos, el cariño, la emoción que viene santificando la curva del Callejón. Y se encuentra la alegría el Consuelo con la Luz y repica la campana llegando a la Veracruz.
Que nos dice esta mañana que reina este buen Jesús bendiciendo con su Palma, al que le espera la Cruz.
El que habla Manso, Humilde en el jumento sentado, en el Silencio con tilde de Misericordia cargado Y poco a poco se gira y se va dando la vuelta, un niño alegre lo mira de su madre no se suelta. Y aprieta fuerte su mano como la mejor veleta porque su madre lo es todo, esencia de doctrina cierta.
Y le enseña señalando como la mejor maestra que Jesús lo está mirando escuchando a quien le reza Y el niño aprieta su mano, la palma en sus manos aprieta, y el sudor le va marcando el surco fino sin meta en la palma de sus manos.
Su faraona celeste o su hebrea vestimenta hace que siempre sueñe aquello con pausa lenta.
Y al segundo se despierte al toque de la corneta que la Virgen aparece como la Madre más bella, más reluciente y bonita la más excelsa Señora en la curva de la Balita.
Ella lo mira de frente, el niño a los dos lados mira, la Virgen que le sonríe, y el Señor le da la vida a la palma de su mano y a su mejor borriquita La Virgen se va acercando, el niño nervioso grita esos vivas que responde su madre ¡qué bien lo imita! El niño que queda en medio de los dos tronos reales y feliz queda gozando porque toca los varales.
La Virgen que mira al niño con su cabeza inclinada y le dice…”con Jesús a ti no te falta nada”. Se abrazan, mecen los tronos, el Sol que a esa hora pica pero el aplauso es el toldo que cubre a la Pollinica 
Vuelve otra vez la fila, para en el Ayuntamiento, coge la calle la Parra camino del santo Templo.
La sed, el calor, la cuesta, la entrega, el sudor…es cierto pero la Fe es la entrega a un Camino que es de ciegos, porque se ven realidades y se abrazan los Misterios y en un segundo te espera la reja del Bautisterio.
La Virgen camina lenta, no se quiere despedir del niño que la está mirando redoblando el tamboril. El niño vive soñando y con poderla vestir y ponerle su tocado con un blanco pecherín, una saya, un crudo manto , o dos ánforas de plata, un centro de nardos blancos y encajes en la bocamanga.
La Virgen que mira al niño para que siempre recuerde que su hermosura plasmó en aquellos ojos verdes, que La vestiría en la Tierra y en el Cielo cuando llegue El Señor se va encerrando, la Virgen mira de frente, sube aquellos escalones del Templo de piedra inerte
“Aquí me tienes Madre mía” le dice con voz temblorosa y Ella le sonreiría…
“¡Dios te salve a ti Señora que en el Domingo de Ramos eres desde la Aurora Virgen Sagrada María mi Amparo y Auxiliadora!…)
Textos: Carrasco Bootello, Antonio Jesús
Pregón SS. De Álora 2016
Foto cabezera: Pedro J. Macias. Interiores: Francisco Ruiz Arjona y Juan José Postigo Lobato
