Mañana empieza la tradicional novena que se le reza a la Virgen de Flores en septiembre de cada año, se lleva orando en Álora desde tiempo inmemorial, aunque la más antigua que se conoce data de 1856, según lo que se lee en la última página de la misma: … “Así lo siento en este N. S. P. San Francisco de Sevilla hoy 16 de mayo de 1756”, firmado por Fray Miguel de Mata que era Lector de Prima en el Convento Franciscano de la Casa Grande de Sevilla. Ver documento
La portada del preciado documento, conservado por Carlos De la Plana Permuy, indica que es una novena a Nuestra Madre de Flores del Convento franciscano de Álora y que fue ejecutado por un ferviente devoto. La duda de la elaboración de la oración está en la fecha de impresión del documento que es la de 1856, dato que podría ser erróneo al atender al día, mes y año que aparece en la última página, lo que hace deliberar en dos opciones: por un lado, que fue llevado a imprenta justo un siglo después, y por otro, que se produjo una errata múltiple a la hora de mandarlo a la imprenta malagueña de D. Francisco Gil de Montes situada en Calle Cinteria, número 3.
La novena se encuentra segmentada en los siguientes apartados: en primer lugar están las Advertencias que se deben de seguir antes de empezar cada día la novena, el consecutivo epígrafe es el titulado Corona de Flores en el que simplemente se tratan de repetir multitud de veces: “Ave Maria, gratia plena” y “Bendito y alabado sea el dulcísimo Nombre de Jesús, y de María. Amen”. A partir de aquí empiezan las distintas oraciones de los nueve días en los que continuamente se hace referencia al nombre de Flor o Flores y a mencionar las letanías marianas. La conclusión la hacen los Gozos, que han pasado a ser hoy día un tradicional himno para el pueblo de Álora con la imagen de la Virgen de Flores.
Desde mediados del siglo XVIII nos trasladamos a principios del siglo XX o más concretamente a la primera quincena de septiembre de 1913, momento en el que se publicaba el número 21 de la Hojita Parroquial de Álora, y en el artículo firmado por las siglas E.R.M., departía sobre lo hermoso que es el nombre de Flores, añadiéndola a este tema una novena inédita, que fue transcrita por el autor, el cual sólo menciona lo que la oración en sí y no los pasos que se deben seguir cada día en la novena, como lo hace en la de 1746.
A principios de los años setenta el párroco don Francisco Ruiz Salinas crea una nueva novena, que será mucho más fácil de leer y breve que las anteriores. Él ordena en tres partes la oración partiendo con las Preces, siguiendo con el Invitatorio y continuando con las Invocaciones que concluyen con la oración final para todos los días. Estas tres partes serán iguales en los nueve días, y cada una de ellas tiene perfectamente definido lo que es enunciado por parte del lector y por parte de todos los demás allí presentes. Ver documento
Pero no sería hasta el año 2001 cuando el Vicario D. Francisco Javier Sánchez Núñez confeccionará una nueva y última novena estructurada con una Oración inicial, igual para todos los días, distintas oraciones para las nueve jornadas en las que seguidas de las Invocaciones, de la Oración final para todos los días y finalmente con los Gozos que son los recopilados de la novena de 1746.
De este texto se ha de hacer hincapié en dos datos puntuales: primero, que las distintas oraciones para las nueve jornadas se mencionan contenidos tales como el Paraíso, la concepción de la Virgen como la nueva Eva, asunto que suscitó gran importancia en la mentalidad del siglo XVII, o pasajes de la Pasión de Cristo en la que se empezó a concederle a María como la Madre de la Iglesia. Y, segundo, que los Gozos de la novena publicada a mediados de siglo XVIII, fueron constituyendo el himno de la Santísima Virgen que es alabado por los máximos expertos en música religiosa tanto en su letra como en su música.
“Pues eres Flor de las Flores, Y de Estrellas Coronadas, Oh Madre de Dios amada. Rogad por los Pecadores”
Foto cabecera:Pedro Macias
