Los niños son la esencia de nuestra Semana Santa. En esta imagen que nos aporta Marisa Segura podemos ver como gastaban su tiempo a principios de la década de los sesenta personajes tan queridos para todos como Antonio Lobato Salas (q.e.p.d.) –centro-, ó Antonio Gil Aguilar –izquierda- y Pedro Díaz Juan –derecha-. Ellos anunciaban con bastante antelación a sus vecinos la proximidad de unas procesiones que seguro no terminaban hasta bien entrado mayo.